La Llave de San Benito
Suele llevar la imagen de San Benito de Nursia, un monje benedictino que vivió en el siglo VI. En la medalla, San Benito está representado sosteniendo una cruz, y a menudo se incluye la inscripción «Crux Sancti Patris Benedicti» («La Cruz del Santo Padre Benito»). Alrededor de la imagen central, se encuentran inscripciones en latín y símbolos que tienen significados específicos.
En la antigua Roma, las llaves eran consideradas amuletos de buena suerte. Se creía que llevar una llave como amuleto atraía la buena fortuna y protegía contra el mal.
Durante la Edad Media, las llaves eran un símbolo cristiano de autoridad y fe. Se representaban en obras de arte religioso, y las llaves eran a menudo asociadas con San Pedro, considerado el guardián de las llaves del cielo según la tradición cristiana.
La referencia a las «llaves del reino» en Mateo 16:19 simboliza la autoridad espiritual que Jesús otorgó a Pedro y, por extensión, a la Iglesia. En este contexto, las llaves representan la autoridad para vincular y desatar, es decir, para permitir o prohibir cosas en relación con la fe y la enseñanza cristiana.
La medalla de San Benito es un símbolo de protección espiritual y se asocia con la invocación de la ayuda divina en la lucha contra el mal. Las inscripciones en la medalla, como las letras C, S, P, B (Crux Sancti Patris Benedicti, que significa «La Cruz del Santo Padre Benito») y las letras V, R, S, N, S, M, V (Vade retro Satana; Nunquam suade mihi vana, que significa «¡Retírate, Satanás! Nunca me aconsejes cosas vanas»), están destinadas a ser fuentes de protección contra influencias negativas.