Medalla San José y Ángel de la Guarda
San José, esposo de la Virgen María y padre terrenal de Jesús, es una figura central en el cristianismo, especialmente en la tradición católica. Su origen se encuentra en los Evangelios del Nuevo Testamento, donde se le describe como un hombre justo y obediente, elegido por Dios para proteger y guiar a la Sagrada Familia. San José es venerado como el patrón de los trabajadores y la familia, simbolizando la dedicación, la integridad y la protección paternal.
Por otro lado, el Ángel de la Guarda es una figura espiritual que, según la tradición cristiana, asigna a cada persona un ángel guardián para protegerla y guiarla a lo largo de su vida. La devoción al Ángel de la Guarda se basa en la creencia de que estos seres celestiales actúan como intermediarios entre Dios y los humanos, ofreciendo protección y consejo en momentos de necesidad. Esta figura representa la ayuda divina constante y la presencia amorosa de Dios en la vida cotidiana.
Ambos, San José y el Ángel de la Guarda, encarnan la protección y el cuidado divino, ofreciendo seguridad y guía espiritual a quienes buscan su intercesión.
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